El ingeniero técnico topógrafo en la redacción de proyectos

Usualmente, la colaboración del ingeniero técnico en topografía en la redacción de proyectos de obra lineal se centra en la obtención de la cartografía base de trabajo, el establecimiento de una red de estaciones que aseguren la posible materialización del replanteo, la elaboración de trabajos de detalle relativos al encaje de los diferentes elementos de la obra y la toma de perfiles transversales para el estudio y valoración del movimiento de tierras. Estos trabajos suelen incluirse en la mayoría de proyectos en anejos específicos, como el de cartografía y topografía o el de replanteo.

Generalmente, las colaboraciones en materia de definición del trazado suelen darse exclusivamente en la fase de obras y acostumbran a tratarse de pequeños ajustes más que de una definición global o de aspectos relativos al diseño de accesos o desvíos provisionales.

En la definición del trazado de un proyecto, debe tenerse en cuenta la normativa técnica específica pero también una visión global del concepto de la obra y de los condicionantes que se interelacionan entre los diferentes apartados que componen el proyecto. Sólo de esta manera se evitan trabajos iterativos que redundan en los gastos y en la calidad del proyecto que se redacta.

En relación con lo expuesto anteriormente, se entiende la posibilidad, sino la conveniencia, de incluir al ingeniero técnico en topografía en las labores de definición del trazado de un proyecto de obra lineal, tal y como se justifica seguidamente.

Así, el I.T.T. tiene, por formación específica, una mayor facilidad para la interpretación de la base cartográfica, de las ortofotografías o de la información catastral y urbanística. Éste es un elemento esencial para la adecuada definición de un trazado, puesto que permite una mejor integración de la obra a proyectar en el territorio:
  • Disminución de afecciones a edificaciones (distinción entre diferente tipo de edificaciones y su estado de conservación, localización de cementerios, básculas o instalaciones especiales).
  • Mayor comprensión tridimensdional del terreno; distinción de zonas de acumulación de aguas , puntos altos, barrancos, escarpados,...
  • Identificación de zonas de arbolado, cultivos, pastos,...
  • Detección de cañadas reales o senderos de largo recorrido.
  • Identificación de servicios de abastecimiento aéreos o incluso soterrados (arquetas especiales seccionadoras, estaciones de bombeo,...)
Por otro lado, por regla general, el I.T.T. participa activamente en el completo desarrollo de la obra, puesto que es encargado de los replanteos de los diferentes elementos que la componen. Así, es conocedor de primera mano de los datos necesarios e imprescindibles, así como de su precisión, para la correcta ejecución de los diferentes elementos que componen la obra.